8.11.2009

Deja que entren

Oskar tiene doce años y está solo. A los doce la soledad no parece tan grave ni pesa tanto, pero existe y puede crecer. Los doce son, más o menos, el fin de la infancia (y, obvio, el fin de una era que no volverá porque no se nos está permitido volver a ella). A esa edad uno no sabe de qué lado está. Sigue creyendo en cosas que no existen pero deberían existir y siente también que su cuerpo está cambiando y que sus deseos íntimos, sus necesidades y sus preguntas, no son las mismas de antes. Oskar, por ejemplo, está enamorado o piensa que está enamorado o cree poder saber que eso que está sintiendo es amor. No puede estar seguro, pero se ilusiona igual porque las dudas no le sirven de nada. La chica se llama Eli y también tiene doce años. De hecho, Eli ha tenido doce años durante largo tiempo y asegura no ser una chica. Eli es un vampiro.


Let The Right One In es la película sueca que por apodo lleva la leyenda: la mejor película de vampiros de todos los tiempos. No sé si sea la mejor, no creo, pero tampoco soy un verdadero conocedor de la materia. Lo que sí sé es que me sorprendió por su manera de ser y porque a pesar de las escenas de sangre y horror que no le podían faltar (porque una película de horror, por más intelectual que sea, debe hacerte saltar por lo menos tres veces), nunca pierde el norte, nunca descuida a sus personajes ni deja que su género supere su identidad. Let The Right One In es una película en la que sale un vampiro, sí, pero no es una película sobre vampiros ni una película que se hizo con el único fin de asustar al espectador mostrándole a un vampiro. Es una historia de amor entre dos niños que no pueden ni saben cómo amarse pero sienten el impulso de hacerlo. Sienten algo y eso es mucho. Sentir. Hay que sentir.


A primera vista, Oskar es una víctima, sus compañeros de la escuela lo maltratan, lo golpean y aprovechan cada oportunidad que tienen para ponerlo en ridículo. Cuando se lo cuenta a Eli, ella le dice: golpéalos de vuelta, duro. Oskar empieza a darse cuenta de que hay otra forma de vivir y esa es enfrentar, levantar los brazos y proteger la otra mejilla antes de que llegue el rasguño. Oskar cambia y Eli se convierte entonces en su ángel guardián. Un ángel guardián que no mide sus fuerzas porque aquello sería medir su cariño y que no tiene malas intenciones pero es lo que es y para seguir siéndolo necesita sangre.

Let The Right One In sorprende por muchas cosas, la dirección de fotografía es impecable y el diseño de sonido amplifica desde la sencillez y con precisión todas las emociones que provoca. Y aunque a ratos ocurren coincidencias demasiado oportunas a favor de la trama, es un buen cuento. Al final te quedas junto a los personajes, conviviendo con ellos. Al final te importan. Al final te duele. Al final el bien y el mal se confunden porque tomas parte.



Disponible en Moviezone. C.C. Espiral, UIO-Ecuador.


5 comentarios:

sean dijo...

Bellísima! y brutal también. El nombre de la peli es el nombre de una canción de Morrissey (Allí me acabó de comprar)
Tampoco soy experto en cine de vampiros, pero llama la atención lo minuciosa que es en respetar las convenciones del género..excepto cuando traspone la clásica historia de vampiros, de lúgubres castillos medievales, a los también lúgubres barrios del extrarradio primermundista. No me acuerdo haber "sentido" tanto viendo una película. En dejameentrar.com está un avance de la novela en la que se basa el libro. Abrazo

The T dijo...

La pelicula es una maravilla. Considero que es de las mejores del cine de vampiros, del cual podria decir si soy medio experto. Justamente, nunca se convierte en pelicula de genero y mas bien, como lo dices, es un cuento de amor, de inocencia; da un vistazo a la vida de un "outcast", del que es molestado en el colegio por aquellos que usualmente carecen de mucho cerebro; de ahi tambien viene un pequeno analisis de la psiquis cuando el nino no puede mas y practicamente parte la oreja de uno de sus atacantes.

En su desolacion, lentitud, en el frio que la pelicula hace sentir al que la ve, asemeja al clasico de vampiros Nosferatu de Werner Herzog, re-make del original de 1922 de Murnau. Como peliculas europeas, no tiene el ritmo avasallador y tormentoso de sus contrapartes norteamericanas ni el gusto por la elegancia gotica y aneja de los clasicos britanicos. Es puramente europea, escandinava, y por momentos genial.

Anónimo dijo...

Lo bacán es que es sumamente realista. Si los vampiros existen, existen como en esta peli. Sin quitarle nada al cine fantástico o a la visión tipo Bram Stoker, a mí me gusta más este enfoque del vampirismo.

Bro, si les gustan más cosas de Vampiros, hay una novela que se llama "La Historiadora", de Elizabeth Kostova. Es una obra moderna que aborda el tema en estos tiempos... no es que sea una obra maestra, pero finalmente te engancha y te estremece. El Libro es grande, las primeras 100 páginas son un poco aburridas... pero luego se dispara. Onda Allan Poe, pero con Vampiros, muy poderosa.

Saludos;

CAV

Juan Fernando Andrade dijo...

personal,

totalmente d acuerdo. sin duda, estamos más cerca de los vampiros q antes, y esa es una buena noticia.

abrazos

-José Antónimo- dijo...

Me gustan los anuncios que les haces a los locales de películas piratas.

Un abrazo.