10.18.2010

Tu piel me hace llorar


El tráiler de The Social Network, la película de David Fincher sobre los creadores de Facebook, es aterrador y hace pensar que nada bueno puede venir cuando se quiere tener amigos a la fuerza, porque sí, porque sumando son un millón de amigos y nadie que tenga un millón de amigos puede estar tan solo como para buscarlos en Internet. Pero lo mejor, lo que me estremeció hasta la médula y me hizo llegar a casa a verlo una y otra vez, fue la canción de fondo, esa versión de Creep que me parece perfecta e imposible aún después de haberla escuchado en un loop infinito.

Al contrario de lo que pensaba, de lo que imaginé y creí un hecho histórico, la versión que se usa para promocionar (¿promocionar?, capaz no sea la palabra correcta, digamos que esta versión sirve de advertencia: algo fuerte viene en camino) la peli no es obra de Trent Reznor & Atticus Ross (este último un productor inglés, colaborador de NIN), autores de la banda sonora, sino de Scala & Kolacny Brothers, un coro de chicas formado en Bélgica que transforma sus canciones favoritas en sus canciones, punto. No es raro que esta pieza magistral venga de Europa, donde más o menos tienen claro quiénes son y entienden que hacer un cover no es vender la identidad sino reafirmarla y hasta potenciarla. Un coro latinoamericano, excluyendo quizás a Chile, Argentina y Brasil, jamás hubiese tenido el descaro de cantar en inglés, mucho menos algo que no sea considero “clásico” aunque, como lo demuestra esta versión, clásico es todo lo que te marca y te acompaña desde cierto punto hacia delante.

No sé cuántos momentos Creep tuve durante la adolescencia ni cuántos de esos momentos se necesitan para dejarla y hacer eso que llaman crecer. Sé que los tuve, que dolieron, que fueron en su mayoría culpa mía, que solo yo los recuerdo, que no he logrado dejarlos ir del todo, que vuelvo a ellos porque extraño el confort de estar triste por algo, por alguien, que llegaron hasta al fondo cuando apenas y podía defender mi superficie. Esta versión me ha devuelto esos momentos o lo que queda de ellos, pero para bien: recuerdo la angustia, ese peso que se soporta cuando se está solo en el cuarto y esa soledad y ese cuarto parecen la eternidad y el mundo. Esta versión me pone down, pero también me hace mirar hacia arriba, pensar que de no ser por todo eso no existiría todo esto.

La versión original de Radiohead nunca me dio tan duro o por lo menos nunca me obsesionó. ¿Qué pasa con esta? Creo que es el hecho de escuchar tantas voces unidas en un solo esfuerzo cuando la canción, si habla de algo, es de la soledad: el factor coro, en este caso, te hace parte de. El piano empieza suave, desde abajo, y va ganando intensidad sólo en ciertos golpes. Las voces entran como un rumor, voces pálidas como fantasmas que van haciéndose carne como los recuerdos que arrastran, sobre todo en la segunda estrofa, en ese I want you to notice when I’m not around que se pasa de la raya y cae en la desesperación, en la súplica, en lo que se derrama cuando se dice en voz alta la procesión que se lleva por dentro.



7 comentarios:

Raul Farias dijo...

Fincher es un maestro para generar emociones en la gente que ve sus peliculas.

Viejo, ya te viste la rabia?? esta buena? le tengo fe a esa película pero el trailer me pareció super malo, me bajoneó

Saludos

Paul dijo...

A Creep de Radiohead nunca le presté atención como tal, y recién le vine a prestar oído cuando en el Unplugged de Korn, Jonathan Davis antes de empezar a cantarla dice que esa canción le ayudó a sobrellevar muchos momentos duro de su adolescencia. Entonces le presté atención. Y el efecto fue el que describes, efecto que en la versión que mencionas se multiplica x 1000.

Comparto 1000% aquello que dices de tener esos momentos Creep que nos obligaron a madurar pero que en el fondo aún no los dejamos ir, porque al final del día seguimos siendo esos mismos adolescentes llenos de miedos y frustraciones, eso si, ahora con una mejorada capacidad de disimulo y mayor disposición al olvido. Para volver a esos momentos solo hace falta un pequeño click, que en mi caso está siempre asociado a la música, y regreso ipso facto a esos momentos.

Textos como este me hacen sentir que no estuve solo en esos momentos, que mi soledad no estaba sola, era coral; que varios estuvimos en el drama del no saber encajar, que crecimos y seguimos con fantasmas que en ocasiones regresan. Nos quedan también las cicatrices.

Salud.

Anónimo dijo...

Navegando, sin experiencia, en este ciberespacio y después de buscar tu nombre en el Google por simple curiosidad, encuentro este blog y siento que ya tengo una razón para no sentirme triste porque ya no leo tus crónicas en la Soho. Sigue escribiendo esto, lo que mejor te sale: tu opinión.
Saludos!

otrocielonoesperes dijo...

los belgas son lo máximo... pregúntale al auverlau !!! jajaja un abrazo inmenso

Juan Fernando Andrade dijo...

RF,

la ví mientras SC estaba trabajando en la edición. creo q es técnicamente impecable.

...y sí, el trailer no le hace justicia.

Tiriel,

en efecto, bro, la hermandad cósmica nos mantiene flotando. gracias x tus palabras, q alimentan mucho este espacio.

Anónimo,

d a poco, voy volviendo a la crónica, este mes tengo cosas publicadas en SoHo y Diners. enjoy!

Coco,

un placer tenerlo x acá, master. nada contra los belgas, mucho menos después d este cover... jajajaja

Anónimo dijo...

Para mí la Creep ganadora es la de Homless Mustard... Acá se las dejo: http://vimeo.com/8132302

Anónimo dijo...

Al ver tu blog me ha interasado el saber que se publica, sobretodo porque lo he encontrado en el comercio y eso me da un poco de seriedad. Pero la verdad es que oir hablar de una pelicula en ese modo me sorprende. Para mi Radiohead es solo un recuerdo de la adolecencia y de un mundo totalmente limitado. Existen otras cosas de las cuales uno puede reflexionar, buscalas...
La parte de los belgas me ha hecho sobretodo pensar a como uno sea poco informado cuanta tradicion exista a este respecto en Europa de la musica. Encuentro que este film sea totalmente comercial.