Buddy Bolden began to get famous right after 1900 come in. He was the first to play the hard jazz and blues for dancing. Had a good band. Strictly ear band. Later on Armstrong, Bunk Johnson, Freddie Keppard, they all knew he began the good jazz. John Robichaux had a real reading band, bur Buddy used to kill Robicahux anywhere he went. When he’d parade he’d take the people with him all the way down Canal Street. Always looked good. When he bought a cornet he’d shine it up and make it glisten like a woman’s leg.
Louis Jones.
Charles Buddy Bolden nació en New Orleans en 1877 y fue allí donde inventó el jazz. Por las mañana trabajaba como peluquero en N. Joseph’s, escuchaba chismes, bebía, bebía mucho, y le daba consejos de toda índole a sus clientes. Para el medio día estaba borracho. Cerraba el local, se iba a su casa, le hacía el amor a su esposa Nora y dormía aferrado a su cuerpo durante cuatro horas. Por la noche visitaba a sus amigas las putas, tiraba, conversaba, y tocaba y tocaba y tocaba. Tocaba en todas partes y si tenía qué beber no paraba de tocar hasta que se desmayaba. Al día siguiente, muy temprano, volvía a la peluquería, desayunaba un whisky puro y si algún chisme le parecía extraordinario lo anotaba y lo publicaba en The Cricket, un pasquín que él mismo redactaba y distribuía. En teoría, era sólo cuestión de tiempo hasta que Buddy Bolden y su corneta se tomaran al mundo por sorpresa y lo conquistaran en nombre de todos los negros de New Orleans. Pero Buddy, un día, desapareció. Su amigo Webb, un oficial de policía adicto al jazz y sobre todo al jazz inventado por Buddy, emprendió una investigación que luego de varios años lo llevaría donde estaba la mejor corneta de todas. Buddy no había desaparecido, se había encerrado. Webb lo encontró en casa de sus amigos Jaelin y Robin Brewitt, que eran pareja. Buddy estaba enamorado de Nora pero también estaba enamorado de Robin y, por supuesto, también estaba enamorado del sexo. Jaelin lo sabía y no le molestaba o se hacía el que no le molestaba. Los tres, Jaelin, Robin y Buddy vivieron juntos y cenaron juntos y vieron muchos amaneceres juntos mientras hablaban de pianos y estrellas. Pero eso, como todo lo demás, tenía que acabar algún día. Buddy volvió a New Orleans con Webb y cuando supo que Nora se había casado con uno de sus mejores amigos decidió vivir con ellos. Cuatro días después, como no lo hacía desde que se había marchado, subió a un escenario. Mientras tocaba, se fijo como cada una de las notas que salían de su corneta se iban haciendo carne en el cuerpo de una mujer desconocida. A sus treinta y un años, Buddy quiso saber hasta dónde podían llegar la música, la trompeta y la mujer y sopló hasta que de su boca empezó a salir sangre y cerró los ojos y ya no podía parar y perdió el control y se derrumbó. Lo llevaron a un hospital y de ahí lo trasladaron a un siquiátrico, donde murió años más tarde, en 1931.
Acabo de leer Coming Through Slaughter, la historia de Charles Buddy Bolden contada por Michael Ondaajte (nacido en Sri-Lanka, criado en Canadá y autor de la misma The English Patient que tanto dio de qué hablar y que nunca se me ha antojado ver pero ahora quiero leer), publicada originalmente en 1976. Un suceso literario en fondo y forma. Un juego. Un laberinto. Un callejón sin salida en el que no queda más que reventarse contra un muro de ladrillos ensangrentados. El libro que más he subrayado en mucho tiempo. Un libro que me hizo leer varias veces cada página porque con una pasada no basta. Contado de manera coral y redactado, a veces, como si el mismo Buddy estuviera hablando: sin comas, son espacios, sin tiempo para pensarlo realmente, entre trago y trago. Solo dale, dale y dale que la canción se acaba cuando se acaba.
Charles Buddy Bolden alcanzó a grabar algo antes de morir pero ninguna de esas grabaciones lo sobrevivió. Su música murió con él.
Bolden, the bottle sucked empty after couple of journeys, Bolden opening his throat muscles and taking it in so he was sometimes drunk by noon and would cut hair more flamboyantly. Close friends who needed cuts and shaves would come in early, well before noon.
Monday nights at Lincoln Park was something to see, especially when the madams and pimps brought their stables of women to hear Bolden play. Each madam had different colour girls. Ann Jackson featured mulatto, Maud Wilson featured high browns, so forth and so on. And them different stables was different colours. Just like a bouquet.
Bolden played nearly everything in B-Flat.
The Cricket existed between 1899 and 1905. It took in and published all the information Bolden could find. It respected stray facts, manic theories, and well-told lies.
The men who came into N. Joseph’s were just as much in need of confession or a sense of proportion as a shave and Bolden freely gave bizarre advice just to see what would happen… Days later furious man would rush in demanding to speak to Bolden (who was then only twenty-four for goodness sake) and he would have to leave his costumer and that man’s flight of conversation, take the angered one into Joseph’s small bathroom and instead of accepting guilt quickly suggest variations.
I go through the evenings with the smell of shaving soap up to my elbows. Is there in my fingers as I play. The layers of soap all day long have made another skin over me. The cleanest in town. I can look at a face and tell how long was it shaved. I work with the vanity of others.
He used to screw a lot and being famous they let him in. He used some of them to get stories for The Cricket. He paid them for that but not for the fucking.
He’s mixing them up. He’s playing the blues and the hymn sadder than the blues and then the blues sadder than the hymn. That is the first time I ever heard hymns and blues cooked up together.
It sounded like a battle between the Good Lord and the Devil. Something tells me to listen and see who wins. If Bolden stops on the hymn, the Good Lord wins. If he stops on the blues, the Devil wins.
Every note new and raw and chance. Never repeated. His mouth also moving and trying to mime the sound but never able to for his brain has lost control of his fingers.
All my life I seemed to be a parcel on a bus. I am the famous fucker. I am the famous barber. I am the famous cornet player. Read the labels. The labels are coming home.
She hitting each note with her body before it is even out so I know what I do through her.
Some saying you went mad and trying to play the devil’s music and hymns at the same time, and Armstrong telling historians that you went mad by plying too hard and too often drunk too wild too crazy.
7 comentarios:
este man no solo soplo su instrumento sino que tambien soplo............ Acabo de descubrir al primer rock star o Jazz star es más las groupies no nacieron con los rockers nacieron con Buddy.
Que loco
Kros
el jazz sirve de materia prima para excelentes historias. sólo hay que recordar el perseguidor de cortazar... eso lo estoy tocando mañana.
quiero el libro de buddy ya. lo consigueste aca?? o como se hace??
jazz man diras no jazz star, por lo de mas si vaya que soplo...
Kros,
como dicel el a., el término adecuado sería jazz man, pero eso d jazzstar me encanta, incluso, pensé ponerle ese título al post.
RF,
1. exacto, me han dado ganas d re leer El Perseguidor.
2. lo pedí x amazon y un pana me lo trajo d la yoni. (creo q puedes pedir libros vía libri mundi o mr. books, pero no me consta)
salud x Buddy!!
Es cierto que el Jazz da historias interesante a mi la que mas me ha cautivado de lo poco que he podido investigar es la vida pasión y muerte de Jaco Pastorius......Supongo que deben saber de quien hablo. Ojala hagan un post del señor que revolucionó el sonido del bajo y que me pareció un musicaso...
Ahi les dejo un link
http://www.listengo.com/musica/jaco+pastorius
Saludos
una bestia cabron!
de lejos el mejor relato
uno de mis favoritos es el album yankees de ese man llamado John Zorn, va solo, chucha, excelente minuto de narracion
Kros,
gracias x el link. la d Jaco es una gran, gran, gran historia.
A,
vamos ahí!!
salud
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